Partes de una puerta

Descubre las principales partes de una puerta, ya que es una parte fundamental de una casa, y hoy en día existen muchos diseños y modelos innovadores. La misma nos ofrece privacidad, seguridad y comodidad en cada parte del hogar. Por lo que aquí podrás conocer a fondo todas las partes de una puerta básica y su importancia.

Partes de una puerta

Marco

Marco de una puerta

Esta es una de las partes de una puerta que cumple un papel fundamental, y sin embargo, muchas veces no se le toma en cuenta. Como su nombre lo indica, este es un marco que está alrededor de la puerta, es la parte estática de la misma.

Su función es darle estabilidad y junto con las bisagras (otro elemento del que hablaremos a continuación) permitir la movilidad de apertura y cierre a las puertas; gracias a la conexión entre estos elementos. Igualmente, el marco está adherido a la pared o muros de la casa o edificación mediante tornillos.

Para instalar el marco de una puerta es necesario también contar con otros materiales, como las cuñas; para así proteger al marco de las elevaciones y descensos de temperatura y procurar la conservación del material.

Bisagras

Bisagras de una puerta

Las bisagras son piezas metálicas que se encargan de permitir la movilidad de la puerta, de que esta se dirija en la dirección deseada por la persona. Como se dijo anteriormente, las bisagras están conectadas al marco y a su vez con la estructura principal de la puerta.

Normalmente una puerta básica cuenta con tres bisagras: una en la parte superior del marco, otra en la parte central y la última en la parte inferior. Las mismas trabajando en conjunto también permiten que la puerta no se desajuste o se salga de su marco; por lo que contribuye a la solidez y seguridad de la puerta.

Su estructura permite que, mediante tornillos o fijaciones, se ancle una parte al marco y otra parte a la puerta. En su eje normalmente tienen un perno para asegurarla. Existen muchos tipos de bisagras, y todo dependerá del tipo de puerta y su función.

Cerradura

Cerradura de una puerta

Entre las partes de una puerta este es el elemento de seguridad. La cerradura se conforma por un mecanismo que puede ser complejo o simple, dependiendo de la puerta. Este elemento impide la apertura de la misma sin introducir su respectiva llave.

La cerradura también está conformada por el cilindro, que es el que se encarga propiamente de dar apertura o cierre al sistema de seguridad de la puerta. En el cilindro es donde se introducirá la llave para poder abrir la puerta. Igualmente, el nivel de complejidad de este elemento, así como su tamaño, dependerá del tipo de puerta en el que se emplee.

En una puerta básica se utiliza este tipo de cerradura convencional o mecánica. Sin embargo, con los avances tecnológicos existen cerraduras inteligentes o electrónicas, que dan apertura con:

  1. Huellas digitales
  2. Lectura de pupilas
  3. Tarjetas autorizadas
  4. Contraseñas

Bocallave

Una vez instalada la cerradura con todos sus componentes, en la parte exterior se coloca la bocallave. Este es más bien un elemento que cumple una función decorativa; puesto que oculta los resultados que se produzcan por la instalación de la cerradura. Así que la bocallave embellece la apariencia de la puerta.

No obstante, también cumple otra función. Sirve de protector al ojo de la cerradura, pues lo protege de posibles agresiones a la misma, así como roces con las llaves u otros elementos. Por lo que este elemento aparte de dar vistosidad a la apariencia física de la estructura, cumple su función protectora.

Manillas o picaportes

A este componente se le puede conocer de distintas formas dependiendo del país o del tipo de manilla. Incluso, aparte de estos dos nombres es también llamado manija, pomo, perilla o tirador. La manilla va situada por encima de la cerradura y de la bocallave. Se utiliza para abrir la puerta de una forma más sencilla y práctica.

En una puerta básica pueden existir diferentes tipos de manillas o picaportes básicos, como por ejemplo:

  1. Pomo: tiene forma ovalada o redonda y puede ser fijo o móvil, este último debe ser accionado en un sentido giratorio; puede que en pro o en contra de las manillas del reloj.
  2. Tirador: este tipo de manilla permite tirar o halar de la puerta para cerrar de ella; pero el mismo no permite abrirla.
  3. Manilla o manivela: esta es una de las más comunes, con las que se presionan hacia abajo para dar apertura al mecanismo.

Cerrojo o pasador

Este es un elemento de seguridad que puede ser adicionado como una de las partes de una puerta básica. Este es un mecanismo muy sencillo pero que puede ser realmente muy útil para proporcionar más confiabilidad a la entrada del hogar.

El cerrojo consta de dos piezas, coloquialmente se dividen como hembra y macho. Una de las piezas se fija a la puerta y al marco, y se unen con una barra o plancha metálica que se introduce entre ambas piezas fijadas. Esta barra metálica es la parte que tendrá movilidad y que permitirá abrir o cerrar la puerta.

Condena

Esta es utilizada en manillas ovaladas o redondas, más conocidas como pomos. A la condena se le puede llamar también como muletilla o pestillo.

Esta pequeña pieza se coloca comúnmente en la manilla que se ubica en el lado interior de la puerta; esto debido a que es como un pequeño mecanismo de cierre o condena de la puerta; ya que solo presionándolo o accionándolo impide que puedan entrar desde el lado exterior de la puerta.

Normalmente este mecanismo de condena o cierre se utiliza en puertas de baños o dormitorios; ya que es un sistema de seguridad de menos alcance y más sencillo, aunque sigue siendo muy efectivo para mantener la privacidad.

Mirilla

Mirilla de una puerta

Este es un componente que puede ser adicional, pero igualmente muy útil. Se trata de un pequeño agujero que va situado en la parte superior o central de la puerta, esto a conveniencia de la persona.

En este agujero va un pequeño vidrio o mirador por el cual se puede observar quién está detrás de la puerta; y el mismo a su vez impide que desde el exterior se pueda observar hacia adentro.

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